miércoles, 27 de febrero de 2013

UNA MAÑANA DE AMOR CUALQUIERA (ELLA)

Buenos días!!

Soy feliz. Soy feliz, soy feliz y soy feliz. Hoy me he levantado con mucha fuerza y muchas ganas (hasta de trabajar!!) y como estoy muy inspirada, os voy a contar una mañana cualquiera de mi vida con Él.

Aproximadamente hacia las 05:30 a.m. suelo despertarme con Él pegado a mi espalda y su erección llamando a mi puerta (toc, toc, toc...), sonrío. 

-buenos días cariño- me dice.
-mmmmmmmm buenos días- respondo y me giro para mirarle y darnos un besito, el primero de muchos a lo largo del día.
-qué tal has dormido?
-bien cielo, y tú? (sabiendo lo que va a contestarme).
-regular (quiere decir mal, en realidad)
-vaya...lo siento mi vida.
-llevo un buen rato mirándote como duermes, me encanta.
-y a mí me encantas tú.

Generalmente nos quedamos un rato abrazados para terminar de despertar (yo) mientras nos acariciamos. Me acaricia la cintura, la cadera, sube hacia mis pechos y poco a poco, baja hacia mi vagina, muy poco a poco, con mucha suavidad, retrasando el momento de llegar a mi clítoris, excitándome a tope. No sé si lo he dicho ya, pero tiene unas manos muy suaves, preciosas y saben acariciar muy bien. Me quedo muy quieta mientras espero sus dedos en mi botoncito, ya llega...ya. Me estremezco, sus dedos se pasean por mi rajita mojada, la recorren entera y se detienen en mi clítoris. Lo frota, lo acaricia, suave, más rápido...empiezo a mover mi pelvis y Él sabe lo que quiero, mete dos dedos y los mueve con una habilidad tremenda que me lleva al primer orgasmo de la mañana. Me relajo, acaricio su pene grande y duro, le masturbo suavemente, más rápido, su respiración se agita cada vez más, quiere penetrame. Se sube encima de mí (mmmmmmmmm Dios...adoro tenerle encima de mi cubriéndome con todo su cuerpo, acariciando su espalda, su nuca...). Entra en mí, me erizo, me contraigo, me corro de nuevo...Me besa, juega con su lengua en mi boca. Se mueve otra vez, suave, es elegante, es elegante hasta para follar, controla su pene para darme mucho placer, no es egoísta, siento que tiene ganas de correrse pero quiere que yo lo haga una vez más.

-vamos nena, córrete otra vez...
-quiero esperarte, quiero correrme contigo...

Estas palabras lo avivan, gime...se mueve más rápido...yo quiero esperarle pero no sé si puedo...me llega y al intentar retrasarlo, el orgasmo es más intenso...

-me voy a correr nena, cariño...me corro...
-Dios...y yo contigo...
-ahhhhhhhhhhhhhhhh me corro cariño....me corro...
-te amo, te amo mi vida, te amo....

Siento las sacudidas de su polla y su leche caliente entrar en mi cuerpo, mientras se aprieta fuertemente contra mí y completamente relajados nos quedamos un rato abrazados recuperando la respiración.

No quiero, pero el reloj me indica que tengo que levantarme e ir a la ducha. Él siempre se levanta conmigo aunque tenga que ir más tarde a trabajar, para preparar el desayuno. Cuando termino de asearme, está en la cocina con todo preparado. La felicidad es máxima, mi hombre trasteando en la cocina, tan guapo, tan varonil, el olor del café y de las tostadas...Le asalto por detrás y le abrazo, le levanto la camiseta para besarle la piel y le lleno la espalda de besos, le meto mano una vez más, le adoro, cada día me enamora más. Desayunamos y repasamos las cosas que hay que hacer, lo que hay que comprar...me obliga a llevarme una manzana para el mediodía, me acompaña a la puerta y se queda mirándome mientras espero el ascensor y...!ME HACE EL ELEFANTE! jajajaja. ¿Sabéis lo que es "hacer el elefante"? Pues es sacar los bolsillos del pijama a modo de orejas y la pilila por la hendidura del pantalón, a modo de trompa y así, con una gran sonrisa, me voy a trabajar.

Que tengáis un día estupendo. BESOS.

1 comentario:

  1. ELLA hay reconocerlo...¡tienes un chico fantástico! Sois todo lo que una pareja tiene que ser, la combinación perfecta. Un beso. Andrea

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