Los días previos. ELLA.

Buenas noches:

Imposible olvidar "ese día". Y no menos intensos fueron los días previos: Encuentros "casuales", una mano que se posa "casualmente" en mi espalda, más cerca, más cerca...de repente, una lengua en mi boca y su olor pegado a mi pelo todo el día, recordándome ese momento. El messenger echaba humo...horas robadas al sueño hablando con ÉL, mi cuerpo palpitaba. Notaba su deseo y el mío crecía por días. Se alejaba y se acercaba a partes iguales, me dedicaba canciones hoy y desaparecía mañana. "Me vuelve loca, me está volviendo loca de deseo y de necesidad de estar con ÉL". Un día no pude más y le dije: "Me apetece terriblemente hacer el amor contigo". Fijamos el día y llegar hasta allí, fue una especie de dulce tormento. Ese día llegó, los nervios me consumían...y casi sin darme cuenta, estábamos desnudos en la cama, tocándonos con urgencia,  lengua contra lengua, Él sobre mí, con todo el esplendor de su fenomenal erección contra la entrada de mi vagina, empapada de toda la excitación acumulada y entonces...entró en mí, largo, duro como una piedra, en una penetración suave y profunda, lenta. Una oleada de sensaciones me recorrió el cuerpo desde la cabeza hasta lo pies, la piel erizada, los pezones durísimos y el orgasmo casi inmediato y tan intenso, que me dejó sin respiración y lágrimas de felicidad cayeron por mis mejillas. Esa fue la primera vez en mi vida, que sentí que me desmayaba de placer. No ha sido la única. 

Continuará...

Buenas noches y mejor sexo. 

Ella.